Unión del sentimiento y la razón (1994)

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Gabriela Aberastury presenta su muestra “Corazón pensante” en la OEA

Por Susanne Franz

Desde el 6 de octubre y hasta el 4 de noviembre se puede visitar la muestra “Corazón pensante” de la artista argentina Gabriela Aberastury en el “Espacio Cultural” de la OEA. Aberastury presenta una exquisita selección de sus obras recientes en diferentes técnicas: dibujos, grabados y técnicas mixtas. En el primer piso se exponen obras más antiguas (incluso de la infancia) y algunas de sus obras para bibliófilos, entre ellas el proyecto más reciente: un trabajo para una elaborada edición de Cortázar.

Según cuenta Gabriela, este es el momento de su vida en el que siente mayor libertad de creación. Durante años no estuvo pintando, y ahora algunas de sus técnicas mixtas están en un 80 por ciento elaboradas en óleo. Al mismo tiempo ha perfeccionado los dibujos y grabados de sus “Construcciones Imposibles”. Es que en estos días le sale todo, y todo al mismo tiempo. ¡Y qué bien lo hace!

Los títulos de sus obras (como el sorprendente nombre de esta muestra y de uno de los dibujos, “Corazón pensante”) surgen durante la creación de las obras. Describen procesos internos que ilustran el abordaje integral de la artista, su principio de equilibrio. La artista no cree que el corazón sienta y la cabeza piense; para ella no existe tal separación. Está convencida de que el cuerpo recuerda más que el cerebro. Y por eso, su punto de partida es la unión de cuerpo y mente, del “principio femenino” y el “principio masculino”. Si tiene en cuenta esto, uno ya no encuentra contradictorias sus construcciones –de temática masculina pero realizadas por una mujer-: sus obra más bien se entienden como testimonios de su “alma entera”.

En cada uno de sus dibujos, la perfeccionista invierte por lo menos un mes de intensa labor. En el caso de los grabados trabaja las placas para después imprimir un único ejemplar, muy raras veces dos. La producción en masa no es lo suyo. Si realiza un segundo ejemplar de un grabado, con leves diferencias con respecto al primero, es por razones “internas”: el dibujo simboliza a la persona, y no cambia, mientras que los factores que cambian -por ejemplo el color o el tamaño- representan las cambiantes circunstancias de la vida.

Gabriela Aberastury vive en Buenos Aires con su esposo y sus siete gatos. Se la caracteriza como una artista -con tanta auto-disciplina como sensibilidad- cuyas obras se originan en la unión del sentimiento y la razón.

Se puede visitar esta recomendable exposición hasta el 4 de noviembre en el “Espacio Cultural” de la OEA, Junín 1940, lunes a sábados de 15 a 20 horas.

Publicado en “Argentinisches Tageblatt” el 22 de octubre de 1994.

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