El día multiplicado (2003)

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Muestra de Patricia Hakim en el Centro Cultural Recoleta

Por Susanne Franz

Objetos de la vida cotidiana, multiplicados en negro, blanco y una transparencia frágil, demuestran la rutina cotidiana de una pareja: el transcurso de un día en su vida que parece repetirse infinita y arbitrariamente. Se levantan a la mañana, se sacan la ropa, se bañan, comen, trabajan, duermen. Se levantan de vuelta.

Es la célula más pequeña de la convivencia humana. ¿O ya es sólo una vida paralela de dos seres, sin que uno se dé cuenta del otro? Ellos ni aparecen en las obras. Los productos de consumo sirven de testigos mudos de su presencia —pero les prestan una identidad engañosa. Parecería que estos objetos pudieran vencer el miedo a la soledad y la muerte, pero sólo lo reprimen. Parecería que lograran cumplir los sueños y responder a los sentimientos, pero sólo los disimulan.

Negro, blanco, vacío. No hay colores. No hay consuelo.

La muestra de la escultora Patricia Hakim en el Centro Cultural Recoleta enfrenta al espectador con dudas existenciales. Inquieta, porque pone en cuestión la supuesta seguridad que da lo cotidiano. Asusta, porque la artista observa desde una distancia muy grande —de un lugar de gran respeto, pero sin piedad.

“El día multiplicado” es un paso hacia adelante en la trayectoria notable de esta artista, un trabajo conceptual que cumple con las mas altas expectativas tanto estéticas como intelectuales.

Publicado en “Argentinisches Tageblatt” el 28/6/03.

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